Coincidiendo con los actos programados por el 40 aniversario de la Fundación Internacional Paz y Cooperación, se ofreció el pasado 3 de noviembre una conferencia online en el Día de las Naciones Unidas (24-10), titulada «Naciones Unidas en el siglo XXI».

En esta ocasión Paz y Cooperación tuvo el placer de contar entre los oradores con don Arturo Pérez Martínez, embajador de España; doña Cléo Martel, estudiante de Ciencias Políticas de la Universidad Sciences Po Rennes, Francia y actualmente colabora con la Fundación Paz y Cooperación; don Enrique Gaspar, presidente de Nexos Alianza y Vicepresidente del Instituto Seda España. La conferencia fue moderada por don Carlos Uriarte, profesor de Derecho en la Universidad Rey Juan Carlos.

La Presidenta de Paz y Cooperación, doña. Rosa Olazábal, inauguró la conferencia con un discurso en el que recordó que, el Día de las Naciones Unidas marca el aniversario de la entrada en vigor de la Carta Fundacional de las Naciones Unidas de 1945. Señaló que esta fecha ofrece una oportunidad anual para ampliar nuestra agenda común y reafirmar los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas. Uno de los fines de Paz y Cooperación es promover los ideales de la Carta de San Francisco a los ciudadanos y las instituciones, para hacer frente a los grandes desafíos del siglo XXI y construir un mundo mejor para las generaciones futuras. La Presidenta de Paz y Cooperación, concluyó su discurso citando las palabras del Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, con motivo del Día de las Naciones Unidas.

Posteriormente, doña Cléo Martel, se refirió a los grandes desafíos a los que se enfrenta la Humanidad en este comienzo del siglo XXI: nuevas tecnologías, desigualdades y discriminaciones, crecimiento de la demografía y escasez de alimentos, persistencia de regímenes autoritarios, conflictos internos, externos y violencias. Cléo Martel recordó que, el cambio climático es uno de los mayores desafíos a los que se enfrenta la «familia humana» puesto que amenaza su propia supervivencia.

«En nuestro mundo globalizado, el multilateralismo es más una necesidad que una opción» así subrayó, que estos grandes desafíos que se plantean a la humanidad no pueden resolverse unilateralmente. El papel de las Naciones Unidas es esencial, ya que parece ser la única institución internacional capaz de mantener un diálogo mundial. Con demasiada frecuencia, las respuestas dadas no están a la altura de las emergencias, en particular la emergencia climática. Por ello, hay que seguir trabajando para que los Estados den respuestas comunes a estos grandes desafíos. Martel concluyó su discurso afirmando que «la obra de las Naciones Unidas nunca ha sido tan necesaria como en este comienzo del siglo XXI».

Don Enrique Gaspar se refirió a su vez a «Las Naciones Unidas en el Siglo XXI», recordando que la Carta Fundacional de las Naciones Unidas y los textos siguientes no se refieren a los Estados, sino a los pueblos. Con el fin de que la Asamblea General tome las mejores decisiones para los pueblos, y no para los Estados, Gaspar, propuso la idea de reformar la Institución integrando a la Sociedad Civil. Además, destacó los excesos de la globalización, del liberalismo y del unilateralismo que han llevado al fortalecimiento de las desigualdades entre los pueblos, a la violación de los Derechos Humanos y al deterioro de nuestro medio ambiente. También recordó, que la Carta de las Naciones Unidas es la mejor expresión del multilateralismo democrático y que es necesario reformar y trabajar para consagrar este principio en nuestra sociedad y luchar contra los grandes desafíos que se le plantean a la Humanidad: el cambio climático y el deterioro de nuestro medio ambiente, las desigualdades entre los pueblos y dentro de los pueblos, la inclusión de las mujeres y las minorías, etc.

El embajador, don Arturo Pérez Martínez, habló de su experiencia con don Joaquín Antuña, fundador de Paz y Cooperación, y dedicó sus palabras al extraordinario trabajo que realizó en las Naciones Unidas y en su Fundación. El embajador compartió numerosos recuerdos con don Joaquín y manifestó, que el fundador de Paz y Cooperación fue un gran hombre con un elevadísimo nivel intelectual y humanista que reflejaba a través de sus publicaciones como «Crónicas del Alba», «Galaxia de Paz», «Crónicas Babilonias», entre otros muchos, que han permitido dar a conocer a la opinión pública los valores y la obra de las Naciones Unidas. El trabajo realizado por la Fundación Paz y Cooperación le llevó a ser designada «Organización Mensajera de la Paz» por la Organización Naciones Unidas en 1987. Asimismo, en 1999 se le concedió a la Fundación el «Estatuto Consultivo Especial del Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas», por sus méritos en materia de Educación, entre ellos, el «Premio Escolar Paz y Cooperación» con sus lanzamientos y entregas de premios en las sedes de Naciones Unidas en Viena y Nueva York, la celebración del Día Escolar de la No Violencia y la Paz con escolares de todo el mundo y la conmemoración de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Y en el año 2018, Paz y Cooperación fue distinguida por La Ilustre Academia de las Ciencias de la Salud Ramón y Cajal con la «Medalla de Oro al Mérito Humanitario», que premia la labor de las instituciones que se han caracterizado por su actuación humanitaria y benefactora ante los más necesitados.

Finalmente don Carlos Uriarte concluyó esta conferencia agradeciendo a los oradores sus intervenciones y a los participantes su asistencia. Por último, la Presidenta de Paz y Cooperación, doña. Rosa Olazábal, les invitó a participar en las próximas actividades de la Fundación.

Eduardo Guaylupo

Artículo publicado en Galicia Digital