En el Día Mundial de la Asistencia Humanitaria, que celebramos el 19 de agosto, el mundo rinde tributo a los trabajadores humanitarios que han sido asesinados o resultaron heridos en desempeño de su labor, y honramos a todos los trabajadores humanitarios y los profesionales de la salud que continúan, a pesar de las dificultades,  prestando asistencia y protección a millones de personas.

Este año, la celebración se produce cuando el mundo se encuentra aún luchando contra la pandemia COVID-19. Los trabajadores humanitarios están superando obstáculos de acceso sin precedentes para ayudar a las personas en crisis humanitarias en 54 países, así como en otros nueve países que han sido catapultados a la necesidad humanitaria por la pandemia COVID-19.

En diciembre de 2008 la Asamblea General declaró el 19 de agosto como el Día Mundial de la Asistencia Humanitaria; en memoria del brutal atentado terrorista, del 19 de agosto de 2003, contra la sede de las Naciones Unidas en Bagdad (Iraq) que se cobró la vida de 22 personas.

Este 19 de agosto rendimos un homenaje especial a los héroes en la vida real que han decidido dedicar sus vidas a ayudar a otros, incluso en las circunstancias más extremas en todo el mundo.

La campaña se centra en qué es lo que mueve a los trabajadores humanitarios a seguir dedicándose a salvar y proteger vidas a pesar del conflicto, la inseguridad, la dificultad para acceder a los que los necesitan y los riesgos relacionados con el COVID-19.

Los héroes de nuestro mundo, aquí y ahora, son tan dignos de admiración y fascinación como los superhéroes, porque son reales. Son reales: ellos han escogido brindar asistencia en las circunstancias más extremas. Sus historias nos demuestran que los héroes de la vida real tienen una capacidad extraordinaria de perseverar a pesar de los obstáculos y, además, lo hacen con humildad y dedicación.

Fuente: Naciones Unidas